5. Autorretrato (1947) y Neptuno (1956)

El artista plasma un personaje mitológico romano, Neptuno, como claro referente del mar y de esta visión histórica y de recuperación de la cultura antigua, siguiendo los patrones estéticos de la escultura griega clásica: cuerpo bien proporcionado y atlético, de acuerdo con el ideal de belleza. En el mosaico, Neptuno coge un tridente con la mano derecha. Según la leyenda, con el tridente podía remover las olas y crear surgencias de agua, provocando terremotos y tempestades con su ira. Lleva una corona, tiene una red entrelazada en sus brazos y está rodeado de animales marinos (peces, un caballito de mar y una medusa). Al fondo de la obra se observan líneas ondulantes.

¿Sabías que…?

El mosaico no siempre ha sido ubicado en el mismo lugar de la casa. Hasta la reforma de 1968, se localizaba en la fachada de mar. Sin embargo, con la ampliación de la vivienda se trasladó a un lateral, donde se puede contemplar actualmente.

En colaboración con:

Museus del Vendrell