8. Club Tabaris

El edificio de la piscina, obra del arquitecto Joan Rosell, constaba de una planta baja y un piso. En la planta baja se localizaban el vestíbulo de entrada, que daba acceso a los vestuarios, baños, guardarropa, bar y al cuerpo de la piscina en la parte central en forma de «L». En el primer piso se ubicaba la piscina propiamente dicha, así como una terraza solárium parcialmente cubierta y otra totalmente descubierta.

Respecto al Balneario Brisamar, obra de los arquitectos Joaquín Iglesias y Francesc Sanvisens, constaba de planta baja y un piso. En la planta baja, estaba la entrada. A su derecha, se localizaba la administración y los servicios sanitarios. A la izquierda, se localizaba el servicio médico, reservando una zona para el dispensario de la urbanización (con entrada independiente al balneario) y, en medio, una fuente luminosa. Detrás de la entrada, se ubicaba un vestíbulo de distribución con una escalera y ascensor para subir al primer piso, así como el acceso a la galería, con quince baños. El primer piso disponía de tres departamentos con instalaciones especiales, otra galería de seis baños y diez habitaciones de reposo para después del baño. La fachada del balneario fue decorada con mosaicos de Santiago Padrós. También cabe destacar el gran vitral de la entrada, obra del mismo artista.

¿Sabías que…?

La piscina ganó el “Premio nacional Victoria” a la mejor construcción deportiva en 1964.
Por otra parte, la empresa Brisamar SA dejó de gestionar la urbanización en 1972 y en 1978 salió a la venta. El Ayuntamiento de El Vendrell la adquirió y se hizo cargo desde entonces.

En colaboración con:

Museus del Vendrell